Alba Muñoz Navarro

Que se pare el tiempo, que yo me quedo aquí, con vosotros, a vivir para siempre. ¿Cuántas veces ha pasado por mi mente esta frase a lo largo de este año? Alicantinos, qué orgullo ha sido llevar vuestro sentir, que también es el nuestro, allá donde hemos ido. Esta noche aquí, rodeada de todos vosotros, no tengo la menor duda de que en este instante desearía que las agujas del reloj se detuvieran, para poder deciros eternamente ¡Bona nit, Alacant!.

Una simple frase para muchas personas, pero para nosotros no, porque es capaz de revivir año tras año estas mismas sensaciones. El día en el que el contador se pone a cero y los sueños comienzan. Donde el corazón nos late un poquito más rápido, latidos que viven y vivirán en nosotras, recordados por siempre por lo que nos hacen sentir. Así que hoy, y con el corazón encendido, os decimos juntas, ¡Buenas noches Alicante!

No os imagináis las veces que he pensado en este momento, porque si algo tenía claro es que quería dirigirme a vosotros como realmente os he sentido, cerquita nuestra, como amigos, una amistad que ha ido creciendo día a día y de la que nosotras siete hacemos gala.

Y ya lo dijo un gran amigo nuestro, nuestro mantenedor Jorge Tejedo, los fogueres sólo se pueden vivir de una forma, se viven con pasión, emoción, ansia de delirio, fogosidad, ambición, aspiración y anhelo. Y sí amigos, qué razón tenía Jorge, porque no entendemos les Fogueres de otra forma, es la fiesta que amamos, en la que hemos crecido y la que nos ha enseñado los valores más importantes de nuestra vida. Ese amor que sentimos por nuestra fiesta lo vieron en nosotras nueve personas, nuestro jurado, gracias por creer y confiar en nosotras, pero sobre todo gracias por brindarnos vuestra amistad.

Y es que este es uno de nuestros fines de semana favoritos. Todos los festers nos ponemos nuestras mejores galas, es decir, la camiseta o chaqueta de la hoguera, y nos preparamos para que la felicidad y la ilusión nos invada, nos preparamos para ellas. ¡Bellesa del Foc d'Alacant y les seues Dames d'Honor 2025! Os estamos esperando para soñar, para brillar, para quereros, y os adelanto ya que aquí siempre tendréis a siete amigas que os tenderán la mano para todo lo que necesitéis.

No sé si os ha pasado alguna vez vivir momentos que en ese mismo instante sabes que vas a echar de menos antes de que se acaben. Nosotras, por suerte, nos llevamos tesoros que son tangibles gracias a personas que han puesto todo su amor para que así sea. Vives y Marí, Castillo, colaboradores de Indumentaria, y en especial José y Toni, gracias por cada puntada de complicidad, la misma que nos han dado ellos. Miguel Ángel y María, gracias por estar por y para nosotras, pero sobre todo por esos ratitos de risas y confesiones que se quedan entre nosotras. ¿Cuántos momentos para recordar? Que han sido inmortalizados por nuestros fotógrafos oficiales, Adri y Tony, gracias a vosotros, a todos los fotógrafos, medios de comunicación y prensa, por dar voz a nuestra fiesta, luz a nuestras palabras, y permitir que su difusión no tenga límites.

Seguramente a todos los que estamos hoy aquí nos han preguntado alguna vez ¿qué es ser foguerer? Ser foguerer es sentir la fiesta como una forma de vida, es emocionarse con el olor a pólvora, con el estallido de una mascletá. Por eso, para sentirlo, os voy a pedir que cerréis los ojos y os transportéis con nosotras: son las dos y estamos en Luceros. ¿No sentís la emoción solo al pensarlo? Ese cosquilleo que nos recorre el cuerpo al oír el primer aviso, la felicidad que sentimos porque la pólvora es nuestra esencia y con cada terremoto vibramos como si nuestros corazones fuesen uno solo. Gracias a todos nuestros pirotécnicos por hacer magia en cada mascletá.

Y hoy me vais a permitir que quiera destacar a uno de ellos, un hombre cuya pasión por la pólvora y el fuego iluminó el cielo y nos llenó de emoción en cada mascletá. Que tu luz nunca se apague y que en cada uno de nosotros siga siempre tu recuerdo encendido. Gracias por todo, Pedro Luis. Allá donde estés, ¡pots començar la mascletá!

Ser foguerer también es sentir el arte efímero que inunda nuestras calles en la planta. Es admirar a nuestros artistas, esos magos de la creatividad que avivan nuestras ilusiones en forma de arte. Hoy queremos agradecer a todos nuestros artistas por vuestro trabajo, vuestro esfuerzo y por crear magia en nuestras calles.

Ser foguerer es vibrar al ritmo de un pasodoble, gracias a nuestros grandiosos músicos. Y bailar a todas horas y emocionarnos con cada nota. Ser foguerer es aclamar a los bomberos para que nos tiren agua en la noche de la crema y disfrutar así de nuestra tradicional bañá. Gracias a bomberos, policías, fuerzas y cuerpos de seguridad, protección civil, sanitarios, escoltas y conductores por hacer que esa noche y todos los días se puedan realizar de la mejor forma. Porque ser foguerer es enorgullecerse de nuestra terreta, de nuestra historia, de nuestras tradiciones. Es unirnos en la alegría y también en la adversidad. Porque juntos, juntos somos infinitamente mejores.

Como aquel 29 de octubre, donde el mundo se nos paró porque una tragedia sacudió a nuestra ciudad hermana. Los alicantinos, junto a miles de personas, nos unimos para ser los primeros en estar allí. Esta desgracia nos ha marcado a todos. Y desde aquí queremos agradecer la ola de solidaridad que se ha visto entre los alicantinos y la comunidad. Comunitad Valenciana, tots a una veu som imparables.

La solidaridad, la unión de la que os hablo, el orgullo que sentimos hacia nuestra ciudad lo he visto reflejado en nuestras fiestas hermanas. Fiestas de moros y cristianos, FAFBA, Semana Santa, Murcia, nuestra querida Burriana, nuestros amigos de Castellón con sus reinas Lourdes y Paula y nuestros hermanos de Valencia con sus falleras mayores María Estela y Berta. Una explosió de sentiments y atencions, una mostra d'afecte sincer que hem pogut compartir amb tots vosaltres. Que la flama que uneix les nostres festes siga eterna. Gràcies per la vostra amistat, gràcies de tot cor.

Ha sido tanto y tan bueno lo que hemos vivido que no podemos estar más que agradecidas. Gracias a la Diputación Provincial, a la Generalitat Valenciana y por supuesto a nuestro Ayuntamiento: Luis, a ti no te vamos a decir que te echaremos de menos porque queremos que tu amistad sea eterna. Gracias por cada confidencia compartida y sobre todo por tu cariño infinito siempre. Gracias a todas las grandes personas que conforman nuestro Ayuntamiento, especialmente nuestra concejala de fiestas, Cristina, por darnos todo tu amor siempre.

¿Y sabéis? Hubo un tiempo en el que comprendí que hay momentos que nunca se dejan de sentir, aunque no los vuelvas a vivir. Hay instantes que recordaremos toda la vida en nuestra cabeza. Hay risas e incluso lágrimas que no se olvidan y personas que se quedan marcadas para siempre. Treinta y ocho foguerers, mujeres y hombres que de forma altruista lo dan todo por nuestra fiesta. Por cada risa, cada abrazo, cada ¡Ay, mis nenas! de nuestra Lidia y cada anécdota que guardaremos siempre. Solamente podemos deciros que hemos sido inmensamente felices a vuestro lado.

Y al frente de esta bendita locura nos encontramos con él, nuestro President, David. ¡Qué suerte tiene Alicante por tenerte a ti al frente de nuestra fiesta! Pero la mayor de las suertes ha sido nuestra porque seas tú nuestra guía, que nadie pare tu inquietud y que tu sentimiento por les fogueres no cambie nunca. Como nosotros decimos, este año hemos pasado más tiempo juntos que con nuestras familias. Pero lo que no sabes, David, es que tanto tú como toda tu familia ya formáis parte de la mía. Gracias por cada momento de esos de los nuestros y por hacer que este año haya sido especial al ir cogidas de tu mano.

Si hay una cosa de lo que estamos convencidas es que algo muy bueno hemos tenido que hacer en otra vida para tener tantas alegrías en esta. Y es que nuestra alegría hace un año se vio multiplicada por siete. Porque lo que no sabíamos era que la fiesta nos tenía preparadas a siete hermanas pequeñas, siete niñas que nos han contagiado su inocencia, su dulzura y su amor por la fiesta. Ese amor tan único que sólo se puede sentir con el corazón de un niño. Chiquitas nuestras, habéis sido nuestra felicidad absoluta. Ojalá el tiempo nos regale momentos y sueños para vivir juntas, porque la vida es mil veces mejor a vuestro lado.

Y entre todas ellas os debo confesar que está mi pequeña debilidad, mi Marti. A nosotras nos vale un solo gesto para entendernos a la perfección. Y cualquier momento, sea el que sea, siempre es mucho más divertido si estamos juntas. Martina, sólo te pido que sigas siendo mi confidente y mi cómplice, que nos demos abrazos, de esos fuertes que nos gustan a nosotras y que nos queramos toda la vida. Sueña, ríe y ama, que prometo estar siempre cerca de ti.

Suerte, mucha suerte, es la que sentimos por pertenecer a siete comisiones que son nuestras raíces y nuestras familias festeras. Hoy volvemos junto a vosotros con toda la ilusión del mundo, a hacer festa, que es lo que más nos gusta. Y yo, como siempre, estaré en mi Portazgo dando 'ñeña' al bombo toda la vida.

Pero si hablamos de suerte, a nosotras nos ha tocado la lotería. Somos siete mujeres unidas, al igual que nuestras siete familias, nuestro apoyo incondicional y nuestra fuente de energía. Con sólo mirarnos, sabéis todo lo que sentimos, así que ahora os pedimos que lo hagáis una vez más. Lo veis reflejado en nuestros ojos, es el amor que sentimos hacia vosotros. Gracias por ser nuestros incondicionales y por apoyarnos siempre.

Y todos tenemos ciertas devociones. Quien me conoce sabe cuál es la mía, mi familia, mi pilar y mi serenidad. Este año y esta vida no hubiese sido posible sin vosotros, así que mi mayor gracias hoy y siempre es vuestro.

Hace muy poquito me preguntaban que qué ha sido lo mejor de este año. Y en esto, amigos, en esto no tenemos la menor duda ninguna de las siete. Lo mejor de este año habéis sido vosotros, los foguerers y barraquers. Por ello, me vais a permitir que hoy me baje aquí, junto a vosotros, para sentiros tan cerquita como siempre. Pero sobre todo, para observarlas a ellas.

Y ahora sí, desde aquí, junto a toda nuestra gente, me rindo, nos rendimos ante vosotras. Y os pido por favor a toda nuestra plaza, a todos los foguerers y barraquers, que os pongáis en pie para ovacionarlas a ellas, a estas seis mujeres que han dado todo de sí y que han transmitido todo el amor que sienten por les Fogueres de Sant Joan. La mirada dulce de Lucía, la alegría de Mar, la pasión de Meri, la sabiduría de Laura, la luz de Marieta y la bondad de Alba. Ha sido la combinación que nos ha hecho únicas y que ha hecho que éste, nuestro equipito, sea el más especial de mi vida. Ojalá bailar juntas al son de Tot Bacores toda la vida y darnos esos abrazos que reconfortan a cualquiera. Habéis sido mi gran regalo, el regalo de llevarme a seis amigas para toda la vida. Y yo simplemente os digo que os quiero y os admiro a partes iguales.

Y es que, amigos, hemos disfrutado tanto junto a vosotros. Nos habéis dado tanto cariño en cada visita a vuestros racós, a vuestras barracas, en cada pequeño momento que nos hemos encontrado que un gracias se queda y siempre se quedará infinitamente corto.

Foguerers, barraquers, hoy las siete os admiramos a cada uno de vosotros y os damos las gracias por querernos. Nuestro paso en este cargo ha sido fugaz, pero nosotras, nosotras no nos vamos lejos. Estaremos siempre ahí, sentadas junto a vosotros como las festeras que somos. Porque si tan solo el tiempo pudiera detenerse, yo me quedaría aquí guardando en mi corazón el vuestro para siempre. Así que sí, que se pare el tiempo, que yo me quedo aquí, en mi plaza, en mi terreta, con vosotros, con mi gente, la que mantiene viva hoy y siempre la Millor Festa del Món.

Por eso, en este pequeño instante y rodeada de todas las personas que son mi hogar, os digo con la mano en el corazón y mirándonos a los ojos, ¡gracias amigos! ¡Gracias por siempre y para siempre Alicante!